Lectura de estudio: Éxodo 14:26-29.
26 Y Jehová dijo a Moisés: Extiende tu mano sobre el mar, para que las aguas vuelvan sobre los egipcios, sobre sus carros, y sobre su caballería. 27 Entonces Moisés extendió su mano sobre el mar, y cuando amanecía, el mar se volvió en toda su fuerza, y los egipcios al huir se encontraban con el mar; y Jehová derribó a los egipcios en medio del mar. 28 Y volvieron las aguas, y cubrieron los carros y la caballería, y todo el ejército de Faraón que había entrado tras ellos en el mar; no quedó de ellos ni uno.
¿Por qué debía extender otra vez Moisés su mano sobre el mar?
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Ahora los egipcios, sus carros, y todo el ejército de faraón están a la mitad del mar mientras el pueblo israelita caminaba hacia la otra orilla. Entonces vino la orden de Jehová a Moisés “extiende tu mano sobre el mar, que sus aguas vengan sobre los egipcios, sobre sus carros y caballerías”, y Moisés extendió su mano sobre el mar, esto sucedió al amanecer, entonces el mar se volvió con toda su fuerza, y los egipcios quisieron huir, pero Jehová derribó a los egipcios en medio del mar. Éxodo 14:27. Dios dividió el mar trayendo un viento oriental – pero ahora – no dice, que pasó para que las aguas se volvieran a su normalidad, pero cuando Moisés extendió su mano, las aguas volvieron a su cauce, y los egipcios había sido derribados en medio del mar. El profeta escribió: “Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegaran…”. Isaías 43:2.
¿De qué manera fue destruido el ejército de faraón?
¡Imagínese que pasó cuando las aguas del mar volvieron a su normalidad! Ver como los egipcios derribados en el fondo del mar fueron sepultados por sus aguas. Nada quedó de aquel ejercito poderoso. Antes Dios, había devastado Egipto con nueve plagas, y en la décima dio muerte a todos los primogénitos, ahora destruía todo el poder militar de faraón, su ejército, con sus carros y gente de a caballo fueron muertos ahogados aquella noche en el mar Rojo. Un autor neotestamentario escribió: “Horrenda cosa es caer en las manos del Dios vivo”. Hebreos 10:31. Faraón le colmó la paciencia a Dios y recibió su merecido. Las cosas que sucedieron a los egipcios es una enseñanza para aquellos que vivimos en el umbral de la venida de Cristo, nos exhorta a atender con mas diligencia las cosas que hemos oído, no sea que nos deslicemos. Hebreos 2:1.
PIENSE EN ESTO. Las 10 plagas fueron un preludio del juicio final para faraón. Antes del juicio final los 7 ángeles derramaran las 7 postreras plagas y después todos los impíos y los que oprimen al pueblo de Dios serán castigados.
