Nehemías 1:5 – 6. RV 1960.
5 Y dije: Te ruego, oh Jehová, Dios de los cielos, fuerte, grande y temible, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos; 6 esté ahora atento tu oído y abiertos tus ojos para oír la oración de tu siervo, que hago ahora delante de ti día y noche, por los hijos de Israel tus siervos; y confieso los pecados de los hijos de Israel que hemos cometido contra ti; sí, yo y la casa de mi padre hemos pecado.
¿Cómo describe Nehemías a Dios en su oración? ¿Cómo oró Nehemías y que reconocimiento hizo en su oración?
COMENTARIO.
Para Nehemías Jehová es Dios de los cielos, fuerte, grande y temible. No es un dios hecho de manos humanas, ni un dios que se rompe cuando cae, ni un dios que tiene oídos y no oye, que tiene ojos y no ve, que tiene pies y no camina, sino un Dios Omnipotente que cumple sus promesas a los que le aman y guardan sus mandamientos. ¿Quiénes son escuchados por Dios? La obediencia es importante para que nuestras oraciones sean escuchadas.Nehemías pide al Omnipotente que oiga sus oraciones que hace de día y de noche. La oración de Nehemías busca que Dios le ayude a vencer a sus enemigos que le dificultan la obra de reconstrucción. Un hombre de oración y fe, lo puede todo. Mateo 21:22. La fe mueve montañas y trae los recursos del cielo a la tierra y hace lo imposible posible. Nehemías nos enseña que la oración eficaz va acompañada siempre de la confesión colectiva e individual. Por eso, el confiesa los pecados de Israel, los personales y los de sus padres.
PARA PRONFUNDIZAR. El libro de Nehemías nos enseña que ante los problemas, intimidación, el acoso y la burla de nuestros enemigos, lo mejor es orar y confesar nuestros pecados a Dios. Antes de enojarnos y atemorizarnos, lo mejor es hacer oración.
¿QUÉ APRENDÍ DE LA LECCIÓN?