Lectura de estudio: Génesis 17:20-21.
20 Y en cuanto a Ismael, también te he oído; he aquí que le bendeciré, y le haré fructificar y multiplicar mucho en gran manera; doce príncipes engendrará, y haré de él una gran nación. 21 Mas yo estableceré mi pacto con Isaac, el que Sara te dará a luz por este tiempo el año que viene.
Lea Génesis 17:20,21. Escriba los puntos de la lectura que bajo su consideración le parecieron importantes.
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Ismael significa Dios oirá, o Jehová a oído tu aflicción. Al hijo de Agar el ángel de Jehová le puso nombre. Génesis 16:11, de esa manera Agar entendió que no estaba sola y que Dios cuidaría de ella y de su hijo. Aunque el hijo de Agar era el primogénito, Abraham escuchó a Dios decir que Ismael no estaba dentro de sus planes (que triste para el patriarca) no estaba incluido en el pacto que Dios había hecho con él, estaba fuera, pero no sin una bendición (los hijos no tienen la culpa de los errores de los adultos) Jehová enderezó el yerro de Abraham y a veces Dios nos tiene que corregir la plana; no solo perdonó al patriarca, también le enmendó la vida. ¿Con cuanta frecuencia los hijos de Dios tomamos decisiones contrarias a su Palabra y el Eterno tiene que corregirnos?
Según Génesis 17:18, Abraham le dijo a Dios: “Ojalá Ismael viva delante de ti”, ¿Cómo se debieran entender estas palabras?
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Abraham temía que Ismael dejara el camino de Jehová y se fuera por el equivocado, deseaba, como todo padre, que su hijo no se desviara de servir al Señor, de ahí la expresión: “Ojalá Ismael viva delante de ti”, es decir, que viva bajo tu mirada, bajo tu protección y bajo tu guía. Dios le había dicho a Abraham: “anda delante de mí y se perfecto”, y es lo mismo que el patriarca quería para su hijo. En Génesis 17:20, le informa lo que va a hacer con Ismael, pero le afirma: “mí pacto es con el hijo que te va a dar Sara por este tiempo el año que viene”. Abraham y Sara se pusieron de acuerdo para que naciera Ismael, lo que planearon, les salió mal. Génesis 16:1-6. Abraham y Sara aprendieron que los planes se frustran cuando se elige diferente a la voluntad de Dios.
¿Qué podemos aprender del error que cometió Sara y Abraham? ¿Por qué no debemos planificar en contra de los que dice la palabra de Dios?
