GUARDA EL BUEN DEPÓSITO.

Lectura de estudio. 2 Timoteo 1:14-15.

14 Guarda el buen depósito por el Espíritu Santo que mora en nosotros. 15 Ya sabes esto, que me abandonaron todos los que están en Asia, de los cuales son Figelo y Hermógenes.

¿Qué era el buen depósito que debía guardar Timoteo?

En el v. 13 Pablo pide a Timoteo que retenga la forma de las sanas palabras ¿Qué son las sanas palabras? Es la doctrina integra de Cristo, sin aumentarle o disminuirle un ápice. “Jesús les respondió y dijo: Mi doctrina no es mía, sino de aquel que me envió. Juan 7:16. Timoteo debía guardar como depósito toda la enseñanza de Cristo y lo que le había enseñado su maestro y padre espiritual; debía guardar el buen deposito en su corazón. “En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti”. Salmos 119:11. La Biblia nunca va a hacer el efecto esperado a menos que se encarne en nosotros y se apropie totalmente de nuestro corazón

¿Cómo podía Timoteo saber que había guardado el buen depósito?

No es lo que digo, sino lo que hago, la Palabra no hay que hablarla, hay que practicarla, debemos aprender a vivir la Palabra. Mateo 7:24. Por último Pablo le dice a Timoteo que lo abandonaron todos los hermanos de Asia; lo dejaron solo en la cárcel, no lo visitaron y menciona a dos personajes por su nombre: Figelo y Hermógenes. No hay mucha información acerca de ellos, pero tal vez eran los líderes que desligaron a las iglesias del Asia del apóstol. El ministro de Dios debe estar preparado para soportar que le den la espalda los que un día le acompañaron. La frase “me abandonaron todos los que están en Asia” significa que las mismas iglesias que él había establecido, no lo querían lo suficiente, porque lo que se quiere no se abandona. Ahora en la cárcel, Pablo estaba solo, no totalmente solo, Dios y sus ángeles lo acompañaban, Salmos 34:7, esa es la mejor compañía que el hombre puede tener; Pablo no sería el único abandonado; a Jesús también lo dejaron solo, aun sus discípulos huyeron. Marcos 14:50, Juan 6:66, pero el salmista escribió: “Aunque mi padre y mi madre me dejaran, Con todo, Jehová me recogerá”. Salmos 27:10.

Para meditar y reflexionar.

¿Cómo imagina el sentir de Pablo después de que lo abandonaron todas las iglesias de Asia? ¿Quiénes eran Figelo y Hermógenes y por qué son mencionados por nombre?