Reflexiona en esta lectura.
8. Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad. Filipenses 4:8.
La Biblia deja muy claro que la vida de las personas es el resultado de sus pensamientos. Proverbios 23:7 declara: “Porque cuál es su pensamiento en su corazón, tal es él”. El equivalente moderno de ese proverbio en el mundo de la informática es “basura que entra, basura que sale”. Así como la información que sale de una computadora depende de la información que ingresa en ella, las acciones de una persona son el resultado de sus pensamientos. Jesús expresó esa verdad en Marcos 7:20-23: “Pero decía, que lo que del hombre sale, eso contamina al hombre. Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios, los hurtos, las avaricias, las maldades, el engaño, la lascivia, la envidia, la maledicencia, la soberbia, la insensatez. Todas estas maldades de adentro salen, y contaminan al hombre”.
APLICACIÓN: Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, Y renueva un espíritu recto dentro de mí. Salmos 51:10.
