FIN DEL ESTUDIO SEMANAL.

Para profundizar.

La segunda carta de Juan está dirigida a la señora elegida y a sus hijos, que tal vez pueda ser una hermana de la iglesia y su familia, o la comunidad cristiana. Quién quiera que sea la señora o la hermana elegida, 2 Juan 1:13, el autor redacta para alertarla contra la predicación de los anticristos. También escribe para aclarar que el que se extravía y no persevera en la doctrina de Cristo no tiene a Dios. La iglesia del tiempo del fin debe estar alerta para detectar a los gnósticos moderno que contaminan la doctrina de Cristo con historias y filosofías mundanas. El siervo de Dios debe enseñar y predicar lo que está escrito, no lo que cree, se imagina o entiende. “que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina”, esa es la orden divina ¿La cumplirás? 2 Timoteo 4:2.