Objetivo. Explicar las razones biblicas por las que se deben evitar los pleitos o conflictos.
Lectura Bíblica. Proverbios 26:17.
17. El que pasando se deja llevar de la ira en pleito ajeno es como el que toma al perro por las orejas.
¿Por qué debemos evitar el conflicto?
Al agarrar a un perro por las orejas se corre el riesgo que el animal se enfurezca y nos muerda. De ahí el proverbio: “Tan peligroso resulta meterse en pleitos ajenos, como tomar por las orejas a un perro bravo”. Somos hijos de Dios, y por lo tanto; no debemos entrar en conflictos. Entrar en pleitos ajenos, en lugar de ayudar, lo complica todo. Dios nos ha encargado promover la paz; Dios, nos ha encargado “reconciliar “, y no atizar el fuego. Hay que evitar a toda costa la violencia, el mundo está lleno de violencia. Génesis 6:13. El cristiano no produce violencia, porque tiene el control de sus impulsos carnales, además, reconoce que la ira es fruto de la carne y los hijos de Dios no somos guiados por la carne, sino por el Espíritu Santo de Dios. 2 Corintios 5:19, Gálatas 5:19-20, Hebreos 12:14, Gálatas 5:15-16.
APLICACIÓN. Lee Colosenses 3:13, Romanos 2:18. ¿Cómo puedes aplicar estos versículos a tu vida?
