Nehemías 4:6. RV 1960.
6. Edificamos, pues, el muro, y toda la muralla fue terminada hasta la mitad de su altura, porque el pueblo tuvo ánimo para trabajar.
¿De qué manera el ánimo nos ayuda ha conseguir lo propuesto?
COMENTARIO. Nehemías y su equipo de trabajo tenían dos retos que afrontar: Terminar de reconstruir los muros ante la oposición de los samaritanos y aguantar las burlas, de los malvados Sambalat y Tobías que con su verborrea pretendían desanimar a los constructores. Su lenguaje de estos malvados llevaban veneno que pretendía matar todo esfuezo y ánimo de trabajo. La obra que hacían estos hombres de Dios, no era para Nehemías, sino del Eterno Creador. Los que trabajan en la iglesia, deben saber que aunque sirven al ser humano, finalmente trabajan para el Señor. Pablo escribió: “no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino como siervos de Cristo, de corazón haciendo la voluntad de Dios” Efesios 6:6. El ánimo en el corazón del pueblo hizo que los judíos estuvieran motivado para terminar la muralla hasta la mitad de su altura.
PARA PROFUNDIZAR. La obra de Dios requiere de muchos hombres y mujeres que tengan ánimo para trabajar, Jesús dijo: ” La mies es mucha, pero los obreros son pocos. ¿Estás dispuesto a unirte al equipo de obreros de Dios?
¿QUÉ APRENDÍ DE LA LECCIÓN?