Objetivo. Explicar los motivos que tiene el proverbista para procurar hacer desistir a los que se afanan por las riquezas.
Lectura Bíblica. Proverbios 23:4
4. No te afanes por hacerte rico; se prudente, y desiste.
¿Es malo ser rico? ¿Por qué Salomón quiere que el anhela ser rico se desista?
Las riquezas no son malas, lo malo está luego como la conseguimos o el uso que le damos. Dios es el dueño del dinero: Mía es la plata, mío es el oro dice Jehova. Hageo 2:8. Pero primero debemos buscar el reino de Dios y su justicia y todo lo demás viene en automático. Mateo 6:33. El problema con las riquezas, es que el hombre con frecuencia las antepone a Dios. Es entonces cuando el dinero se convierte en un dios que rivalza con el Creador del universo. No se puede servir a dos señores, no se puede servir a Dios y a las riquezas. No eches a perder tu relación con Dios, no arruines tu familia, tu salud, o tu paz interior. La tranquilidad y la paz del alma – no la consigues – ni aún cuando fueres el hombre más rico de la tierra.
APLICACIÓN. Señor no me mucho para no ser arrogante, ni me des poco para quejarme de ti, dame lo suficiente para vivir feliz.