Objetivo. Explicar las diferencias que hay entre ser diligente y obrar apresuradamente.
Lectura Bíblica. Proverbios 21:5.
5. Los pensamientos del diligente ciertamente tienden a la abugndancia; Mas todo el que se apresura alocadamente, de cierto va a la pobreza.
¿Qué dos personajes nos presenta el texto?
El texto bíblico presenta dos clases de individuos: El diligente (activo, cuidadoso, esmerado) y el descuidado. El diligente planifica bien lo que va a hacer, no obra de bote pronto sino que analiza las cosas antes de realizarlas. El diligente nunca deja para mañana lo que debe hacer hoy. Por otro lado está el sujeto que hace las cosas rápido y que deja todo para mañana, este individuo se caracteriza por ser desordenado e inconstante. Aunque el v.5, habla de riqueza y pobreza material, los cristianos debemos ser diligente en nuestro cristianismo, mientras esperamos la venida de nuestro Señor Jesucristo. Mateo 25:13-30.
APLICACIÓN. Nunca dejen de ser diligentes; antes bien, sirvan al Señor con el fervor que da el Espíritu. Romanos 12:11. NVI.