Lectura para profundizar. Éxodo 19:9.
9 Entonces Jehová dijo a Moisés: He aquí, yo vengo a ti en una nube espesa, para que el pueblo oiga mientras yo hablo contigo, y también para que te crean para siempre.
¿Por qué Dios habló con Moisés desde la nube espesa?
La mayoría de los hombres que fundaron alguna religión afirman que Dios les habló. ¿Pero quienes lo vieron ¿Quiénes pueden testificar? Cuando Dios habló con Moisés, lo hizo delante de toda una nación con hechos innegables. La religión de Israel está basada en evidencias, en hechos reales, que se pueden ver, oír, sentir, y palpar. Solo lea como se estremecía y humeaba el monte cuando Dios habló con Moisés, y como 2.4 millones de personas fueron testigos de este magno evento al experimentar en carne propia lo que pasó aquel día. Éxodo 19:16-19. Por eso los judíos afirman, que su religión está fundamentada en el testimonio de una nación, y no en lo que afirma un grupo limitado. Es necesario aclarar la palabra religión, porque algunos tienen un concepto inexacto en cuanto al término. La palabra religión es bíblica y está escrita en Hechos 25:19, 26:5, Santiago 1:26, 27.
Lea Éxodo 19:19. ¿Cuáles son los puntos clave del versículo?
El evento del Sinaí es único, jamás se ha visto algo similar en la historia del mundo. Todos los varones, todas las mujeres, y todos los niños de Israel, escucharon hablar a Dios. Mientras el sonido de la bocina (shofar, el cuerno de carnero) se oía cada vez más fuerte, Moisés hablaba, y Dios le respondía con voz tronante. ¿Qué hablaba Moisés, y qué le respondía Dios? No lo sabemos, pero lo importante era que todos escucharon a Moisés platicar con Dios. Cuando el pueblo de Israel oyó hablar a Dios y responder las preguntas que hacía Moisés, no le quedó duda alguna que su líder era el vocero de Jehová. El hecho del Sinaí da confianza a los judíos de todos los tiempos, pues cada judío no importa en qué lugar del mundo viva, sabe que Dios le dio la Torá a Moisés y que sus antepasados fueron testigos. ¿Quién más puede decir esto?
PIENSE EN ESTO. En ninguna parte de la Biblia se encuentra una declaración así: Moisés hablaba y Dios le respondía, Moisés es único en la historia bíblica que habla con Dios para recibir instrucciones directas.